En inglés, "pulpo" se dice "octopus".
En inglés, “pulpo” se dice “octopus”. Esta palabra viene del griego antiguo... O quizás no. Pero si sí viene del griego antiguo, entonces el plural “octopi”, que muchas veces se encuentra en inglés, es incorrecto... ¿o quizás no?
Todo este enredo de ocho patas lo explicaremos hoy en este #LunesDeLenguas
En el Mediterráneo hay muchos pulpos y los griegos antiguos los conocían. Lo sabemos porque los pintaron en algunas vasijas.
ferrebeekeeper.wordpress.com/2…
Pero, ¿cómo les decían?
Una teoría es que los llamaban ὀκτάπους (oktápus) [u ὀκτώπους (októpus)], de “okta” (ocho) y “pus” (pie). Es decir, el ochopiés.
en.wiktionary.org/wiki/%E1%BD%…
Pero el problema con esta teoría es que no hay muchas evidencias escritas de que esta palabra fuera la que usaban para el animal.
El léxico de Liddell, Scott y Jones (o LSJ), publicado en 1843, es uno de los diccionarios más respetados de griego antiguo. Según estos muchachos, ὀκτάπους quería decir “de ocho pies”. Pero no quería decir nada sobre los pulpos.
perseus.tufts.edu/hopper/morph…
Según una edición del LSJ de 1901, la palabra también se refería a “alguien que tenia dos bueyes y un carro” (porque dos bueyes suman ocho patas).
archive.org/details/greekengli…
Pero en la edición aumentada de 1940 del LSJ aparece una entrada que asegura que uno de los significados de la palabra es “octopus vulgaris”, el nombre científico de pulpo.
perseus.tufts.edu/hopper/text?…
Para afirmarlo cita a Alejandro de Trales, un médico que en su “Therapeutica” usa “oktápus” para referirse a un pulpo.
Pero Alejandro no era griego antiguo sino bizantino y escribió eso en el siglo VI d.C. Entonces no es mucha evidencia de cómo hablaban los griegos antiguos.
Entonces vamos a la otra teoría, que es que los griegos antiguos, a un pulpo, le decían πολύπους (polýpus), es decir, “el de muchos pies”.
El LSJ, para esta palabra, sí tiene una acepción de “pulpo”.
perseus.tufts.edu/hopper/morph…
Y, para darle mayor fuerza a esta teoría, sabemos que los antiguos romanos, en latín, a un pulpo le decían pōlўpus.
dizionario-latino.com/dizionar…
Justo de ahí vienen las palabras de muchas lenguas romances para el animal: pulpo, polipo, poulpe...
Los romanos les copiaron muchas cosas a los griegos, ¿por qué no les habrían copiado cómo decir “pulpo”?
Pero, ¿esto qué tiene que ver con el inglés? Ya vamos para allá.
“Octopus” no desciende del griego antiguo, directamente, sino que viene de la palabra latina “octopus”. Pero esta palabra no era usada por los romanos, sino que fue inventada para el neolatín, una forma de esta lengua, usada desde el Renacimiento, para escribir tratados científicos.
es.wikipedia.org/wiki/Neolat%C…
Una de las obras más famosas publicadas en neolatín es, justamente, el Systema naturæ del sueco Carl Linneaus (Carolus Linnaeus en neolatín) que, en varias ediciones desde 1735, se propuso clasificar y darles un nombre científico (en neolatín, claro) a todos los seres vivos.
En su décima edición (1758) apareció la clase “vermes”, animales entre los cuales figuraba el “octopus”, parte del orden “octopodia”.
en.wikipedia.org/wiki/Vermes_i…
La palabra “octopus” seguro ya estaba en uso para referirse a un pulpo antes de esa décima edición, pero fue su publicación la que fijó su significado y la que causó que, eventualmente, se convirtiera en la palabra de uso común para referirse al animal en inglés.
Antes de eso, el inglés tenía otras palabras de uso común, como “preke”, “poor-cuttle”, “pourcontrel”, “eight-armed cuttle”, “devilfish” y (sorpresa) “polypus-fish”, “polyp” y “poulp”.
grammarphobia.com/blog/2014/02…
Pero íbamos a hablar de plurales y estamos a punto de llegar allí.
En inglés les gusta, a veces, formar el plural de las palabras que derivan del latín o del griego antiguo con los finales que esas palabras habrían tenido en su lengua original (y no con la terminación -s que es común para los plurales ingleses).
Esto sucede por la simple razón de que a algunas personas les suena más elegante.
Pero las reglas de pluralización en griego antiguo y latín son complejas, lo que nos lleva al asunto:
Como les conté en el LdL anterior, el latín es una lengua flexiva, en la que sustantivos y adjetivos cambian sus finales según la función gramatical que cumplan.
noblogo.org/lunes-de-lenguas/e…
Pero además, las reglas según las que cambian las palabras son diferentes dependiendo de a cuál de las cinco declinaciones pertenezca y a qué raíz tenga la palabra. (En griego antiguo pasa lo mismo, pero sólo tiene tres declinaciones).
Entonces, tanto el latín como el griego antiguo tienen muchísimas maneras de formar un plural.
En inglés contemporáneo usualmente se copian del plural nominativo. Para palabras de la segunda declinación latina, esto quiere decir que el singular que termina en -us se convierte en -i.
“Alumnus”, tanto en latín como en inglés, se vuelve “alumni” en plural.
Y así, por imitación, muchos angloparlantes dirían que el plural de “octopus” es “octopi”.
Como vimos, “octopus” no es una palabra latina, sino neolatina. Y, tras ser acuñada, se volvió parte de la tercera declinación latina. Ahí la raíz del genitivo es “octopod-” (vean el LdL anterior) y el nominativo plural es “octopodes”.
en.wiktionary.org/wiki/octopus…
¿Por qué? Porque viene del griego antiguo ὀκτώπους (así los griegos antiguos quizás no usaran la palabra para referirse a los pulpos).
Y en griego antiguo ὀκτώπους (októpus) es de la tercera declinación (griega), su raíz de genitivo es “ὀκτώποδ-” (októpod-) y su plural nominativo es ὀκτώποδες (octópodes).
Por eso, hay quienes proponen que un plural más correcto, en inglés, para “octopus” sería “octopodes”.
¿Pero es más correcto?
En cierto sentido sí, porque “octopus” no deriva de una palabra latina de la segunda declinación cuyo singular termine en -us y su plural en -i.
Pero en otro sentido, ambos plurales podrían ser igual de incorrectos.
Estos plurales parten de la pregunta “¿cómo lo habría dicho un hablante de la lengua en la que se originó esta palabra?”.
Como vimos, un romano antiguo no habría dicho “octopi” ni “octopodes”, sino “polypi”. Y un griego antiguo podría haber dicho “octopodes”, pero probablemente no para referirse a varios pulpos. Para eso quizás habría dicho “polypodes”.
¿Qué es correcto, entonces? Los plurales latinos o griegos en inglés no son obligatorios. Son sólo una preferencia. Pluralizar las palabras con -s siempre es válido.
Y por eso, para el diccionario de Merriam-Webster, “octopi” y “octopodes” son plurales válidos, así como lo es “octopuses”.
merriam-webster.com/dictionary…
(Dato curioso, en griego moderno, “pulpo” se dice χταπόδι (chtapódi), que viene, lo adivinaron, de ὀκτώπους).
En español, el participio es una forma adjetiva de un verbo. Es una forma de transformar un verbo en una palabra que describe la cualidad de algo*. De “amar” viene el participio “amado”, que describe a algo o alguien que suscita amor.
En latín un participio es lo mismo. Pero a diferencia del español, en latín el participo puede tener cuatro formas.
Y de ellas hablaremos en este #LunesDeLenguas.
*A veces es una palabra usada en verbos compuestos (“había amado”), pero eso se sale del tema.
En latín existe el participio perfecto pasivo, que es de donde viene nuestro participio, aunque no significa exactamente lo mismo.
Este participio se forma con la raíz del perfecto (por ejemplo, la del verbo “amo” sería “amat-”) a la que se le suma el sufijo “-us” para masculino, “-a” para femenino, o “-um” para neutro, todos estos en nominativo singular. (No se preocupen, no los cargaré con una lección de gramática latina).
Es decir, este participio sería: “amatus”, “amata”, o “amatum”.
“Perfecto” implica pasado, pero un pasado en el que una acción ya se cumplió.
“Pasivo” implica que a quien o a lo que se refiere este participio está recibiendo la acción del verbo.
Entonces, “amatus” se podría traducir como “el que fue amado”, “el que ha sido amado”, “después de ser amado” o, menos frecuentemente, como nuestro ya conocido “amado”.
Ese es fácil y está muy bien, pero vamos a los otros.
En latín también existe el participio presente activo que, como les dije, no existe en español, pero sí nos dejó una serie de palabras reconocibles.
Este se forma con la raíz del presente (la de “amo” es “ama-”), a la que se le juntan la partícula “-nt-” y los sufijos de género, número y caso (que se llaman “desinencias”).
Pero, a diferencia del caso anterior, aquí las desinencias no son -us/-a/-um (que se llaman de primera y segunda declinación), sino que son de la tercera declinación.
En la tercera declinación (en singular, nominativo y para efectos de este participio) masculino, femenino y neutro son iguales: terminan en “-ns”.
En los demás casos y números, el masculino y el femenino son exactamente iguales entre sí. El neutro es diferente en varios casos.
Además, “activo” quiere decir que en este participio estamos hablando de alguien o algo que realiza la acción.
Entonces, el participio “amans” (en nominativo” o “amantis” en genitivo) significa “el/la/lo que ama”.
Aquí hay que hacer una pausa, porque les dije que este participio se formaba con “-nt-” y, como ven, “amans” no tiene esa partícula.
Ok, está bien, tengo que cargarlos un poco de gramática latina. El latín es una lengua flexiva, en la que las palabras cambian su forma según su función gramatical.
En latín les pasa esto a sustantivos y adjetivos (y participios, que son adjetivos). Cada una de estas formas se llama “caso”.
El caso más común es el nominativo, que es la forma de una palabra cuando es el sujeto de una oración.
En la tercera declinación, el nominativo puede tomar casi cualquier forma. En el caso de los participios, esa forma siempre es “-ns”. (Pero ese no es el caso de los sustantivos. Por ejemplo “rex” es un sustantivo de la tercera declinación).
Lo de “-nt-” aplica para otros casos. Como el genitivo, que es cuando una palabra cumple el rol de complemento de posesión u origen. “Amantis” = “del que ama”.
Por eso, los sustantivos en el diccionario latín se suelen listar con las desinencias nominativas y genitivas, para saber de qué estamos hablando.
“Rex” (que significa “rey” va a aparecer como “rex, regis”. Así sabemos cuál es la raíz con la que se forman el genitivo y otros casos.
dizionario-latino.com/dizionar…
Pero los adjetivos (y participios) se listan según sus tres géneros. “Amatus” aparece como “amatus, -a, -um”. Y “amans” aparece como “amans, amans, amans”. Porque ya sabemos que el genitivo en los tres casos es “amantis” dizionario-latino.com/dizionar…
Y ya que saben esto, volvamos al punto: del participio presente activo latín nos vienen muchos sustantivos que significan “el/la/lo que realiza tal acción”.
Una serpiente es un animal que se arrastra (“serpo” en latín). Un/a “adolescente” es “quien está creciendo” (del verbo latín “adolesco”, que significa “crecer”). Un/a presidente es alguien que preside.
Es de aquí, de esta identificación entre masculino y femenino gramatical, que surge un argumento a favor de decir “la presidente” o “la gerente” en español contemporáneo. Aunque la misma RAE recomienda decir “la presidenta” para subrayar el género femenino. rae.es/noticia/es-la-president…
Pero ahora vamos a los dos participios que más me hacen falta en español. Comenzando por el futuro activo.
Este se forma con la raíz del perfecto, la partícula “-ur-” y las desinencias de las declinaciones primera y segunda (-us, -a., -um).
“Amaturus” quiere decir “el que amará”.
Este es el participio usado en la famosa frase “ave Imperator, morituri te salutant” (“saludos, Emperador, los que moriremos te saludan”) dicha, según Suetonio, por presos obligados a morir en un ejercicio naval para el entretenimiento de las masas, en saludo al emperador Claudio.
Una frase que luego fue apócrifamente atribuida a gladiadores en el Coliseo. Que es como la mayoría, incorrectamente, la recordamos (comúnmente como “Ave, Caesar, morituri te salutant”).
en.wikipedia.org/wiki/Ave_Impe…
El participio que nos queda es el futuro pasivo, que se forma con la raíz del presente, la partícula “-nd-” y las desinencias de primera y segunda declinación.
“Amandus” es “el que será amado, pero más comúnente “el que merece ser amado” o “el que debe ser amado”.
Este participio está en otra famosa frase latina: “Carthago delenda est” (“Cartago debe ser destruida”).
Esta frase fue popularizada por Catón El Viejo, un político romano que pronunciaba una versión de ella al final de todos sus discursos en el Senado antes de la Tercera Guerra Púnica, a manera de expresar su opinión de que los enemigos púnicos (más de ellos en este Lunes de Lenguas: noblogo.org/lunes-de-lenguas/e…) deberían ser eliminados por completo.
en.wikipedia.org/wiki/Carthago…
¿No les gustaría tener una sola palabra en español para decir que alguien será [verbo] o debería ser [verbo]?
Bueno, para terminar, si pusieron atención, se habrán dado cuenta de que en latín los participios presente y perfecto activos son posibles, pero no existen. ¿Por qué? Pues porque no, las lenguas no siguen lógicas fáciles de escrutar.
Pero sí hay maneras para suplir estas ausencias con otras maneras de decir las cosas: dcc.dickinson.edu/grammar/lati…